El gramaje es una de esas palabras que se repiten mucho en el mundo textil. Lo vemos en fichas de producto, en catálogos y en la descripción de camisetas: 180 GSM, 200 GSM, 240 GSM… Pero, ¿qué significa de verdad? ¿Y es cierto que a mayor gramaje, mejor es la calidad de una prenda?
Hoy vamos a desmitificar este concepto y a darte herramientas para que sepas detectar si una prenda es de buena calidad o no, sin dejarte llevar por el simple número.
Qué es el gramaje en la ropa
El gramaje (GSM, gramos por metro cuadrado) indica el peso de un tejido en relación a su superficie. En otras palabras, cuánto pesa un metro cuadrado de esa tela.
- Una camiseta de 150 GSM será más ligera y transpirable.
- Una de 220 GSM tendrá más cuerpo y será más gruesa.
Esto no significa automáticamente que la segunda sea “mejor”. Significa que es diferente, y que se adaptará mejor a ciertos usos o estaciones.
El mito del gramaje = calidad
Muchas marcas han convertido el gramaje en un argumento de venta: “camiseta de 240 GSM, calidad premium”. Pero la realidad es que el peso no lo es todo.
Puedes tener una camiseta pesada que se deforma tras dos lavados porque el algodón no es de buena calidad, o una camiseta ligera que mantiene su forma y suavidad durante años gracias al tipo de hilo y al acabado.
La calidad real depende de más factores que vamos a ver ahora.
Factores que sí definen la calidad de una prenda
Tipo de hilo
- Ring-spun o hilado en anillo: más suave, resistente y uniforme.
- Algodón peinado (combed cotton): fibras más largas, sin impurezas, tacto premium.
- Open-end: más barato, menos suave y duradero.
El gramaje no te dirá nada de esto, pero el tipo de hilo sí marca la diferencia.
Acabados del tejido
- Compacting: reduce encogimiento y mantiene la forma.
- Tratamientos anti-pilling: evitan que salgan las famosas “bolitas”.
Una prenda de 180 GSM con buenos acabados puede durar más que otra de 240 GSM sin estos procesos.
Confección
Fíjate en:
- Costuras dobles o reforzadas.
- SPI (stitches per inch): más puntadas por pulgada = mayor resistencia.
- Refuerzos en hombros y cuello.
Estos detalles son invisibles en la etiqueta de gramaje, pero cruciales en la vida útil de la prenda.
Cuándo importa realmente el gramaje
- Prendas de verano: mejor gramaje bajo (140–170 GSM) para mayor frescura.
- Prendas de invierno o oversize: gramaje alto (200–260 GSM) para más cuerpo y caída.
- Camisetas básicas del día a día: lo importante no es tanto el número, sino la combinación de gramaje equilibrado + buen algodón + confección sólida.
Cómo detectar ropa de buena calidad (más allá del gramaje)
- Toca el tejido. Debe sentirse suave, uniforme y con densidad equilibrada.
- Revisa costuras. Si ves hilos sueltos o puntadas muy separadas, mala señal.
- Estira ligeramente. Una prenda de calidad recupera su forma.
- Mira dentro. Si el cuello y hombros tienen refuerzos, durará más.
- Comprueba la etiqueta. Busca menciones a ring-spun, algodón peinado, tratamientos anti-encogimiento.
Conclusión: el gramaje es solo una pieza del puzzle
El gramaje es útil para entender si una prenda será ligera o pesada, pero no determina por sí solo la calidad.
En Regaliz Funwear creemos que la moda con identidad no se mide en gramos, sino en coherencia entre diseño, tejido y confección. La próxima vez que compres, no te dejes impresionar por el número: revisa el conjunto y apuesta por prendas que duren, que se sientan bien y que reflejen tu estilo.
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